Primero fuimos con las vallas, las cuales estaban colocadas en tres calles, una con vallas más bajas y otras dos con vallas más altas y una separación distinta entre ellas para que cada uno pudiera ajustarse a su longitud de zancada. Al principio cada uno las saltaba como podía o sabía y después el profesor nos reunió para comentar los fallos y explicar la técnica correcta. Los aspectos relevantes de los que más hablamos fueron la pierna de ataque y la pierna de impulso. La de ataque es la que se lanza contra la valla y esta debe ir flexionada hasta que la rodilla alcanze la altura de la cadera, momento en el que la pierna se extiende y busca rápido alcanzar el suelo. La de impulso debe pasar flexionada y en posición horizontal al suelo.
Otros aspectos que comentamos fueron la distancia entre vallas, que debe ser de tres pasos de manera que coincida siempre la misma pierna de ataque. Además, el tronco debe inclinarse un poco favoreciendo una búsqueda rápida del suelo. Por último comentamos la distancia correcta que debemos tener respecto de la valla, ya que si nos aproximamos mucho a ella saltaremos con una parábola mayor y si nos distanciamos mucho corremos el peligro de que el obstáculo caiga. En ambos casos el atleta pierde mucho tiempo y estropea el ritmo de carrera.
En segundo lugar nos colocamos en grupos de 4 personas y trabajamos relevos. Estuvimos trabajando las dos maneras que existe de pasar el testigo: ascendente y descendente y ajustando el tiempo y el espacio de entrega de este en la zona de cambio habilitada.
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